Como siempre sucede, un ciclo se está cerrando en nuestras vidas para dar un paso más allá. En la forma es solo un cambio de casa pero en la realidad es mucho más que eso. Nos marchamos de la ciudad, ¡por fin! Nos vamos a un pueblo en las afueras donde sabemos que estaremos bien y, lo que es más importante, que Ahmed Nur estará mejor que aquí.
Es un gran cambio el que comienza y, aunque hay momentos de temor y duda, sabemos -sé- que algo maravilloso nos aguarda o, como mínimo, algo sereno y calmado.
Esto es una pequeña despedida porque el cambio conlleva un "dejar atrás" que hay que asumir. Una limpieza para dejar entrar aires puros. Una renovación para estar abiertos a los designios de Allah.
No sé cuanto tiempo estaremos sin Internet. Quizá sean semanas o quizá meses. En cualquier caso, siempre intentaré acordarme y redactar de vez en cuando lo que va sucediendo en mi interior. De alguna manera, esto que con tanta ilusión y cariño comencé ha sido un gran bálsamo para mi, un mágico lugar de recogimiento y liberación. Espero seguir alimentandolo con los nuevos pasos de Ahmed Nur es nuestra nueva vida. Mientras tanto, tan solo mandar un cálido abrazo para todas las que sacáis un ratito para leernos a veces y con una sonrisa mandaros un... ¡hasta pronto!
3 comentarios:
QUE SEAS MUY FELICES EN VUESTRO NUEVO HOGAR......UN BESO A LOS DOS Y HASTA PRONTO
Salam, preciosa! la primera impresión de ver la casa me ha recordado mucho a Chipre!!
Que baraka.
Un beso y felicidades y Bismillah!
todo lo mejor en tu nueva vida!!!!
un beso y hasta la vuelta.
Publicar un comentario