Hace unas semanas salimos de viaje los 3. Marchamos a otro país aunque, si miro atrás, fue mas bien a otro mundo.
Una gran experiencia disfrazada de vacaciones. Unos días en los que viajé hacia el interior de mi misma sin dejar escapar ningún recóndito lugar de mi corazón, de mi mente.
Un lindo tiempo que me hizo bajar a la profundida de un océano para salir a flote renovada y limpia.
Una gran acogida que me ha enseñado cuanto hay dentro de mi por mostrar, por potenciar, por compartir. Unos brazos abiertos que me han dirigido a sacar lo más bello que tengo para dar a mi hijo.
Esta puerta fue mi preocupación hasta que se volvió mi refugio. En ella las personas más dulces han cuidado de nosotros hasta hacerme comprender la manera innata que hay en mi para cuidar.
Endulzar la vida ya no es una opción, es una forma que quiero aprender y mantener ya que hacer felices a los que más quieres cuesta demasiado poco para no hacerlo.
Farah, alegría, así me llamo desde entonces. Así quiero que me conozca la gente y eso es lo que quiero intentar trasmitir cada día de mi vida.
Gracias Ya Mawlana por esta miel tan dulce. Gracias por cuidar de mi, de nosotros. Gracias por tu tiempo, tu dedicación, tus oraciones y bendiciones. Gracias por mostrarnos, guiarnos y aguantar nuestras rebeldías. Que Allah te de más y más de Su luz y te alivie con tu carga. Que Allah te recompense infinitamente. Amín.
5 comentarios:
Me alegre leerte tan bien Farah, espero que me contagies con tus alegrías, pues yo soy pura triteza
¿Que pasa, linda? ¿Por que andas triste?
Farah, te gustaría escribir en Mamística este mes de mayo???
Lindas palabras! Un saludo
Gracias Rocio :)
Gisela, estaria encantada de hacerlo.
Un beso
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